Álvaro Cabero Fernández, arquitecto técnico y bombero profesional
Un estudio aplicado al Auditorio Riberas del Guadaíra demuestra cómo la simulación informática puede revolucionar la planificación de evacuación y la intervención de los equipos de emergencia
¿Cómo garantizar que las rutas de evacuación e intervención en un edificio sean realmente seguras ante un incendio? ¿Cómo comprobar que las medidas de autoprotección diseñadas sobre el papel resistirán las condiciones reales de una emergencia? Estas son las preguntas que planteo en el proyecto, que se han aplicado técnicas de simulación avanzada en el Auditorio Riberas del Guadaíra (Sevilla) para evaluar su comportamiento ante un incendio.
La propuesta parte de una convicción clara: en edificios de pública concurrencia, no basta con cumplir los requisitos normativos. Es necesario anticiparse al fuego con herramientas que permitan simular y entender su evolución y las condiciones reales de evacuación. Con este enfoque nace una metodología específica basada en el diseño prestacional, apoyada en software especializado basado en lenguaje Fire Dynamics Simulator (FDS), que ofrece una nueva perspectiva para la planificación de la seguridad en edificios complejos.
Del cumplimiento al conocimiento: diseño prestacional frente a diseño prescriptivo
La normativa actual en materia de lucha contra incendios sigue apostando, en su mayoría, por soluciones prescriptivas que aplican de forma genérica a diferentes tipologías edificatorias. Sin embargo, esta estrategia no siempre se adapta a las particularidades espaciales, de uso o materiales de un edificio concreto. Frente a este modelo, el diseño prestacional (Performance-Based Design) propone una aproximación basada en el análisis específico de riesgos y en la definición de estrategias de protección personalizadas.
En este proyecto, el diseño prestacional permite no solo analizar las rutas de evacuación teóricas, sino conocer con exactitud, segundo a segundo, cómo evolucionan las condiciones de seguridad en esas rutas según parámetros como la temperatura, la visibilidad, la toxicidad del humo o la presencia de oxígeno.
Un método riguroso en cinco fases
La metodología desarrollada por Cabero se estructura en cinco fases, que combinan análisis documental, trabajo de campo, modelado BIM y simulación dinámica:
- Estudio del plan de autoprotección del Auditorio, identificando zonas de riesgo, aforos y escenarios desfavorables desde el punto de vista de la evacuación.
- Visita técnica y toma de datos, recogiendo información clave sobre los materiales combustibles, características geométricas y condiciones reales de uso.
- Modelado en entorno BIM y configuración de simulaciones, integrando la geometría del edificio, los materiales y cargas de fuego, y el comportamiento previsto del público y los bomberos.
- Ejecución de simulaciones con FDS y Pathfinder, obteniendo datos dinámicos sobre propagación del fuego, condiciones de supervivencia y eficacia de los recorridos de evacuación e intervención.
- Análisis y evaluación de resultados, identificando puntos críticos, tiempos máximos de seguridad y zonas donde sería necesario intervenir para mejorar la protección.
El resultado final es una matriz dinámica que indica en qué momento y en qué zonas del edificio se superan los límites críticos para la seguridad de las personas o la viabilidad de la intervención.
🔗 Vídeo 1: Evacuación general del auditorio
🔗 Vídeo 2: Evacuación de la grada superior
🔗 Vídeo resumen del montaje
Resultados concluyentes y mejoras propuestas
Entre los hallazgos más relevantes del estudio se encuentran:
- Identificación de puntos de saturación peligrosos en escaleras y pasillos, como la escalera del sótano -2, donde la densidad de ocupantes y la progresión del humo podrían comprometer la evacuación a los 79 segundos del inicio del incendio.
- Medición de temperaturas críticas y concentración de gases tóxicos, como en el hueco de escalera donde se alcanzan valores preocupantes en apenas 252 segundos.
- Detección de zonas con visibilidad comprometida y de rutas que dejan de ser seguras antes de completar la evacuación total prevista en los planes actuales.
Con estos datos, el autor plantea una serie de mejoras en el diseño de evacuación y en la planificación de intervención, como el refuerzo de rutas alternativas, la sectorización de espacios o la actualización de protocolos de actuación de bomberos.
Impacto en la seguridad y nuevas aplicaciones posibles
Este tipo de análisis, basado en simulaciones empíricas y modelado computacional, no solo permite validar o corregir las medidas de autoprotección, sino que tiene un gran potencial para ampliar las capacidades del sector de la prevención y extinción de incendios.
Entre las aplicaciones futuras se plantean:
- Desarrollo de protocolos específicos por edificio, según sus características arquitectónicas y uso real.
- Uso de realidad aumentada para entrenar a equipos de emergencia en espacios difíciles de simular físicamente.
- Evaluación preventiva de edificios públicos o privados desde los gabinetes técnicos de bomberos, para diseñar actuaciones más seguras y eficaces.
- Reducción del riesgo para los ocupantes y minimización de la exposición de los equipos de intervención, aumentando su capacidad de respuesta.
“Como bombero profesional desde hace 12 años, puedo afirmar que la metodología y las herramientas utilizadas en este proyecto suponen un avance sin precedentes en la prevención de incendios y en la reducción de sus consecuencias.”
— Álvaro Cabero Fernández
Este Trabajo Fin de Grado ha sido reconocido con un premio a los mejores Proyectos Fin de Grado, entregado en los Premios Nacionales de Edificación del Consejo General de la Arquitectura Técnica de España (CGATE) en la edición de 2023, como muestra de su excelencia académica y relevancia para el sector.





