Contenidos
- 1 Mientras la demanda crece año tras año, la promoción pública y privada sigue en mínimos históricos.
- 1.1 ¿Cómo describiríais la situación actual del acceso a la vivienda en España? ¿Qué factores estructurales están detrás del problema?
- 1.2 ¿Estamos ante una crisis coyuntural o frente a una transformación de largo recorrido en el modelo residencial?
- 1.3 ¿Qué papel deben jugar los poderes públicos en la promoción de vivienda asequible? ¿Qué medidas concretas os parecen más urgentes o eficaces?
- 1.4 La vivienda se ha convertido en un activo financiero. ¿Cómo puede reequilibrarse su función social sin frenar la inversión y la regeneración urbana?
- 1.5 ¿Qué peso debería tener la rehabilitación energética y estructural en las políticas de vivienda de los próximos diez años?
- 1.6 ¿Qué tipo de alianzas (público-privadas, intersectoriales, sociales) pueden acelerar un nuevo modelo de vivienda más inclusivo y sostenible?
- 1.7 ¿Qué papel puede jugar la industrialización de la construcción en una nueva etapa de vivienda asequible y de calidad?
- 1.8 ¿Qué zonas o ciudades están marcando un camino distinto que merezca ser observado o replicado?
- 1.9 ¿Qué datos o indicadores clave deberían acompañar cualquier debate riguroso sobre vivienda?
Mientras la demanda crece año tras año, la promoción pública y privada sigue en mínimos históricos.

Entrevista a Lluís Moreno presidente de la Cambra de Contractistes d’Obres de Catalunya CCOC, en relación con el Monográfico sobre “El Futuro de la Vivienda en España”
¿Cómo describiríais la situación actual del acceso a la vivienda en España? ¿Qué factores estructurales están detrás del problema?
La principal causa del problema de acceso a la vivienda en España es el desequilibrio estructural entre la oferta y la demanda, una brecha que se ha ido ampliando desde hace más de diez años y que, en aquel momento, no se relacionaba aún con consecuencias políticas o sociales. Ahora sí.
El aumento de la demanda de nuevos hogares se explica por diversos factores:
- La generación de hijos de los baby boomers, hoy entre los 25 y 35 años, que buscan emanciparse cerca de donde han crecido.
- El crecimiento de hogares unipersonales.
- El incremento constante de la inmigración.
- En zonas especialmente tensionadas, la llegada de expatriados con alto poder adquisitivo o con apoyo económico empresarial que buscan ubicaciones privilegiadas.
En paralelo, la oferta tanto pública como privada está en mínimos históricos. Basta con revisar informes como el de las cátedras APCE-UPF y Tecnocasa-UPF, que muestran una caída alarmante de la vivienda protegida respecto a la libre.
¿Estamos ante una crisis coyuntural o frente a una transformación de largo recorrido en el modelo residencial?
No estamos necesariamente ante una transformación estructural. El reto pasa por reequilibrar la oferta respecto a la demanda. Si se generan 100.000 nuevos hogares al año, se deberían construir 100.000 viviendas anuales para no agravar la brecha.
¿Qué papel deben jugar los poderes públicos en la promoción de vivienda asequible? ¿Qué medidas concretas os parecen más urgentes o eficaces?
Los poderes públicos deberían centrar sus esfuerzos en dos frentes:
- Creación y disponibilidad de suelo, ya sea para promover directamente vivienda protegida o a través de fórmulas de colaboración público-privada.
- Facilitar la iniciativa privada, evitando medidas que puedan desincentivarla (como el 30% de cesión obligatoria en promociones privadas en Barcelona) y agilizando los trámites administrativos para licencias y cédulas.
La vivienda siempre ha sido un activo financiero: es el colateral de hipotecas, el aval de negocios, o una fuente de rentas mediante alquiler o venta. Esta realidad permite la existencia del mercado de alquiler.
La mejor forma de reequilibrar su función social es aumentando la oferta, lo cual fomenta la competencia y reduce la presión sobre los precios.
¿Qué peso debería tener la rehabilitación energética y estructural en las políticas de vivienda de los próximos diez años?
La rehabilitación no está directamente relacionada con la falta de vivienda, ya que pocas unidades están fuera de mercado por su estado. Sin embargo, cumple un papel fundamental desde el punto de vista medioambiental, de salud y bienestar de los residentes. Es una línea de actuación complementaria e imprescindible.
Las que los gobiernos estén dispuestos a implementar. El sector privado actúa guiado por la rentabilidad, por lo que cualquier modelo (concesiones, derechos de superficie…) que sea viable económicamente tendrá acogida.
¿Qué papel puede jugar la industrialización de la construcción en una nueva etapa de vivienda asequible y de calidad?
Puede desempeñar un papel relevante en el incremento de la oferta a medio plazo, tanto pública como privada. Pero es necesario que la apuesta por la industrialización sea clara, con un compromiso firme que genere confianza en las empresas para que inviertan en este modelo. En cualquier caso, la construcción convencional seguirá siendo predominante en el sector.
¿Qué zonas o ciudades están marcando un camino distinto que merezca ser observado o replicado?
La Comunidad de Madrid, con el Plan Vive, puede ser un ejemplo interesante para replicar en otras zonas tensionadas. Aun así, es importante tener en cuenta que cada territorio tiene una casuística propia que dificulta la aplicación directa de un mismo modelo.
¿Qué datos o indicadores clave deberían acompañar cualquier debate riguroso sobre vivienda?
Insisto en que se basa en dos números:
- Número de creaciones nuevas de hogar (demanda)
- Número de viviendas construidas (oferta).
Estos dos datos deberían ser el punto de partida de cualquier análisis riguroso.